• Gran pesar por muerte del papá del alcalde de Quillota Oscar Calderón

    Como una persona ligada a la zona interior de la Quinta Región fue Oscar Calderón Herrera, padre del actual alcalde de Quillota, Óscar Calderón, quien falleció el jueves a los 83 años.

    De su padre, el jefe comunal quillotano heredó la pasión por el servicio social, que hasta avanzada edad realizó.

    Oscar padre, oriundo de San Felipe, trabajó en diversas comunas de la región, principalmente en INDAP, la que lo llevó a establecerse un tiempo en Quillota, mientras él llevaba a cabo temas relacionados con la reforma agraria.

    El año 1974 , sale de INDAP y comienza un periplo familiar, que lo llevó a vivir por varias regiones y comunas, instalándose finalmente en el año 77 en Rinconada de Los Andes. Ciudad en la que el alcalde también vivió hasta que migró hasta Valparaíso para seguir sus estudios universitarios.

    Es precisamente el ingreso del actual alcalde a la universidad, lo que lleva a su padre a trasladarse hasta Limache, para estar cerca de las cosas que más amaba, el campo, y sus hijos.

    Desde ahí retomó su trabajo con las organizaciones sociales, que lo llevaron a trabajar a la Gobernación, a la Intendencia y la Municipalidad de Nogales, siempre trabajando con organizaciones sociales.

    "Él trabajó en un montón de cosas, como taxista en colectivo, vendiendo baldosas, trabajó en Esval, en la Intendencia, en la Gobernación, en la Muni de Nogales, siempre ligado a l trabajo social y siempre muy ligado al sector rural y al mundo campesino" recordó el alcalde.

    En la gobernación, recordó Óscar Calderón hijo, "trabajó a cargo de la relación con las organizaciones de adulto mayor, pero su orgullo más grande, en Quillota, fue haber coordinado a las organizaciones sociales para la creación de la sede de la Unión de Juntas Vecinales".

    El alcalde calificó a su padre como un hombre ejemplar y sencillo: "Su amor por los nietos, la tierra, vibraba regando, plantando tomates, era un viejo muy lindo. Su simpleza, la humildad, su fuerza, era un gran hombre, un excelente papá y abuelo" concluyó un muy emocionado Óscar Calderón, momentos previos a la misa fúnebre. J