Felipe Osiadacz Sanhueza (27) y Fernando Candia Olcay (28) son dos amigos que, al igual que muchos chilenos, se fueron a probar suerte con el programa Working Holiday en Nueva Zelanda. Durante su estadía, decidieron viajar y eligieron como destino a Kuala Lumpur, la capital de Malasia.

La misma noche que llegaron, los dos amigos salieron a recorrer la ciudad, hasta que un malayo, que iba acompañado de una mujer, los siguió al hotel en donde se hospedaban. Según un post que Macarena Candia, prima de Fernando, compartió en Facebook, este hombre "se encontraba bajo los efectos de alguna droga" y los atacó cuando se iban a subir al ascensor. "Fernando y su amigo defendieron a su compañero (un tercero que aparentemente iba con ellos) y al inmovilizar al atacante le dio un paro cardíaco", detalló la joven que ha declinado hablar con la prensa.

Desde entonces, la justicia de Malasia los acusa de homicidio, un delito que de acuerdo a sus leyes, se paga con la horca. En este momento, los amigos llevan siete meses recluidos en la "Sungai Buloh Prison", uno de los complejos penitenciarios más grandes de Malasia y que alberga al doble de reos. Desde ahí se escriben cartas con sus familiares, reafirman que lo suyo fue legítima defensa y que la única gran prueba que hay es la grabación de una de las cámaras del hotel.

Sentencia de muerte

La sentencia para estos jóvenes chilenos se dará a conocer el próximo 29 de mayo. Sólo quedan unas semanas y los cercanos están angustiados. Fernando Osiadacz, papá de Felipe, quien vive en Concón, se reunió con Cancillería el pasado 12 de abril a través de la Plataforma de Ley de Lobby. Allí le contó al subsecretario de Relaciones Exteriores, Oscar Silva Navarro, que las cartas de apelación que han sido enviadas por la abogada "han sido rechazadas" y reiteró que lo sucedido fue un accidente. Ayer durante la tarde, La Estrella intentó comunicarse con él, pero no hubo respuesta.

El resto de los familiares también guarda silencio. Felipe Candia, primo de Fernando, dijo que nadie quería hablar por orden de la Cancillería y porque cualquier declaración podría ser "un riesgo".

Apoyo a la familia

Gran pesar y preocupación existe al interior de la Universidad Andrés Bello y particularmente en la Escuela de Ingeniería Comercial sede Viña del Mar, donde Felipe Osiadacz Sanhueza realizó sus estudios en esta facultad, titulándose el año 2014. Patricio Centeno, director de esta escuela manifestó que no poseen más información que la que se ha conocido públicamente y que dice relación con que Felipe estaría enfrentando un juicio en Malasia. "Lo que hemos hecho desde un primer momento es dar todo el apoyo a la familia para que pueda tener todos los antecedentes que ayuden a la defensa de Felipe", planteó Centeno.

El académico añadió que como es lógico, como universidad y escuela, les preocupa "cuando alguien que ha pertenecido a nuestra institución enfrenta una situación tan dramática como la que está teniendo en este momento Felipe", dijo el directivo.

Patricio Centeno detalló que se le ha entregado a la familia todos los certificados que dan cuenta que Felipe se tituló en esta escuela. "Él fue un buen alumno, con una conducta, durante todos sus años de estudio, impecable, de manera que como persona siempre gozó de la estimación de sus compañeros y profesores. Nada indica que pueda explicarnos la situación en que hoy día se encuentra, desde ese punto de vista es más impactante", comentó el académico. Centeno destacó el carácter colaborador y participativo de Felipe Osiadacz y su buena disposición a participar en acciones de orden social.

Dada la compleja situación que enfrenta el ex alumno, Centeno precisó que su caso también permite sacar lecciones para los estudiantes de esta casa de estudios. "Esta situación tan lamentable tiene que servir para que a futuro otros ex alumnos o personas vinculadas sepan los riesgos cuando se va a países con culturas tan distintas a la nuestra. No se puede hacer las mismas cosas en un país donde no se piensa de la misma manera, eso hay que tomarlo en cuenta", añadió el académico. J

El senador Francisco Chahuán tuvo acceso a la carpeta investigativa del caso y hace 5 meses envió los primeros oficios a Cancillería para solicitar una adecuada defensa para Fernando y Felipe. Ayer declaró que "me he hecho la plena convicción de que los jóvenes son inocentes. Ellos están en condiciones extremas y además se está por iniciar el juicio. Están expuestos a la pena de muerte; por eso es tan importante que la Cancillería actúe. Esperamos que el canciller Roberto Ampuero entienda quelos chilenos requieren una adecuada defensa". El parlamentario aseguró que los jóvenes "actuaron en legítima defensa. Fueron atacados por una persona que los persiguió al hotel, estos hechos se produjeron en el lobby, mientras los jóvenes pedían que se llamara a la policía".

Guillermo Holzmann, analista político internacional, explica que con los datos que se manejan, hay que verificar si la persona fallecida tiene antecedentes anteriores de delitos y de salud. De la Cancillería, comenta que su rol "es de orientar las gestiones y no de salvar" , y que si la sentencia condena a los jóvenes, queda apelar. "Todo depende de las pruebas que muestre la fiscalía de Malasia. Se pueden colocar recursos a través del sistema internacional y hablar con el Rey que va a poder actuar una vez que haya sentencia. No antes", asegura.