Durante los primeros años de la década pasada Los Molles, en La Ligua, aún se caracterizaba por ser una localidad que escapaba del avance inmobiliario que ya había comenzado en la zona céntrica de la comuna. Así, la cotidianidad de sus habitantes giraba en torno a las actividades desarrolladas en torno a su pequeña caleta de pescadores y algunos emprendimientos gastronómicos.

Entonces, en medio de esa tranquilidad, sus vecinos apenas podían imaginar lo que vendría después.

Con el tiempo, la industria inmobiliaria puso sus ojos en Los Molles y comenzó la ejecución de proyectos de este tipo. Así, al poco andar, también partieron los problemas para la comunidad que creció y vivió toda su vida allí.

Desde entonces, la temporada estival es la más caótica debido a la masiva llegada de visitantes. "Los Molles está sometido a una presión medioambiental que amenaza destruir nuestra calidad de vida, amenaza destruir nuestro humedal, amenaza destruir nuestra playa, en un lugar en que no hay agua potable para los vecinos (...) Se están construyendo edificios de 200 departamentos, donde el alcantarillado revienta, el sistema de alcantarillado, todos los veranos", enfatiza Nicolás Ferraro, vecino del lugar e integrante del Colectivo Cabildo Ciudadano Los Molles.

Valeria Castillo, también vecina de la localidad, comparte la preocupación por el avance de este tipo de obras en el lugar. "No existe planificación urbana (...) Nosotros tenemos problemas de agua potable, de aguas servidas, tenemos problemas de hacinamiento de los habitantes oriundos de Los Molles, que no tienen lugares donde puedan existir proyectos Serviu, porque todos los terrenos son privados", recalca.

Humedal en peligro

Junto con el entorpecimiento de la calidad de vida de los habitantes de Los Molles, el avance inmobiliario ha puesto en alerta a la comunidad también debido al nefasto impacto que podría ocasionar en el ecosistema local y, en particular, en el humedal Estuario Los Molles.

Este lugar posee un importante valor socio-ecológico por su contribución a la biodiversidad local y provincial, tomando gran relevancia por ser considerado reservorio de agua en una zona con un marcado estrés hídrico.

Asimismo, este lugar entrega beneficios ecosistémicos fundamentales a la zona, como el control de inundaciones y oleajes, detención del avance de los procesos erosivos costeros, mitigación ante posibles eventos de tsunami, filtración de agentes contaminantes, hábitat de una fauna y flora de gran relevancia biológica por contener poblaciones de aves nativas residentes y migratorias, constituyendo, además, un recurso de gran valor cultural, turístico, científico y paisajístico.

Actualmente, existe un nuevo proyecto inmobiliario que se está levantando sobre la rama lateral del humedal, esto pese a los esfuerzos locales por intentar proteger el lugar. De hecho, esta semana habitantes del lugar presentaron un recurso de protección ante la Corte de Apelaciones de Valparaíso con el objetivo de frenar este tipo de construcciones.

"Se solicita que (...) se restablezca el imperio del derecho, ya que se ha visto amenazado y afectado directamente la garantía de vivir en un medio ambiente libre de contaminación y, por supuesto, el derecho a la vida", detalla el abogado Marcelo Ignacio Poblete.

El jurista añade que "de esas dos maneras se ha puesto en riesgo la vida porque este proyecto junto con su hermano están impidiendo el escape y salida en caso de una inundación, crecida o tsunami, que está siendo cada vez más periódico debido a que el calentamiento global y, por supuesto, el cambio climático así lo está demostrando a simple vista. Además se está solicitando que no se dañe más el humedal".

En la presentación del recurso también estuvo presente el electo gobernador regional, Rodrigo Mundaca, quien enfatizó que se debe además hacer un trabajo más profundo. La nueva autoridad, que asumirá el 14 de julio, sostuvo que "hoy día es necesario evaluar y corregir los instrumentos de ordenamiento territorial que existen en la Región de Valparaíso. Los instrumentos de ordenamiento territorial que existen en la Región de Valparaíso hablan del uso del suelo, pero no hablan de la factibilidad hídrica, no hablan del alcantarillado".

En vías de protección

Una posibilidad para que efectivamente se logre proteger a este humedal del avance inmobiliario asoma luego de que el jueves 17 de junio el ministerio de Medio Ambiente declarara admisible la solicitud de reconocimiento de humedal urbano, conforme a la Ley 21.202, del humedal Estuario de Los Molles presentada por la municipalidad de La Ligua el 12 de abril.

Cabe recordar que el actual Plan Regulador regional data de 1996 y no reconoce la calidad del estuario ni establece alguna figura de protección.

Ahora, corresponde a los técnicos y profesionales del ministerio de Medio Ambiente la revisión de los antecedentes, evaluar la solicitud y, finalmente, resolver si se reconoce el estuario como humedal urbano. J