Como una iniciativa que sería la solución para recargar el embalse Los Aromos de Limache y así asegurar el futuro suministro de agua potable para cerca de un millón de personas de la región fue anunciado, a inicios de enero, el inicio de la construcción de la denominada conducción Romeral por parte de Esval. Sin embargo, a los habitantes de este sector homónimo de Hijuelas no les cayó para nada bien el proyecto, ya que enfatizan que ocasionaría serios daños a su calidad de vida como consecuencia, precisamente, de la merma del recurso hídrico.

Los vecinos de Romeral están preocupados y así lo han demostrado en las últimas semanas con campañas en contra a través de redes sociales y una reciente manifestación, realizada el pasado fin de semana en el sector.

En particular, temen que "se nos sequen todas nuestras napas subterráneas porque las están sobre explotando, las van a sobre explotar con este proyecto (...). Producto de la sequía ya bajaron cuatro metros los pozos del comité de agua potable en un año, que no es menor. O sea con este proyecto es cosa de tiempo y estaríamos como una segunda Petorca. No queremos ser zona de sacrificio", comenta una habitante del lugar en representación de su comunidad, pero que prefiere mantener su nombre en reserva para evitar supuestas represalias, asegura.

Además de los inconvenientes que el proyecto ocasionaría para la disponibilidad de agua potable para el consumo humano, aseguran que al concretarse la iniciativa también desencadenaría un impacto en la calidad de vida y las actividades productivas, al ser un sector que concentra en su mayoría a pequeños agricultores.

"La mayoría de la gente acá tiene animales, siembras, sus siembras las llevan a la feria de La Calera, otros las llevan a Lo Valledor, muchas también tienen flores. Entonces, ¿de qué vamos a vivir si no tenemos lo vital, que es el agua? (...) La mayor parte de las verduras las llevan desde acá, del valle del Aconcagua, al quedarnos sin agua acá, también ellos se quedarían sin frutas y verduras, sin flores también. Es un efecto dominó", añade con preocupación esta vecina.

"Ya compartimos"

La posición que tienen contra el proyecto de Esval también se relaciona con que, aseguran, no habrían sido informados de la iniciativa y solo se habrían enterado de esta por los medios de comunicación en enero de este año.

"Nos molesta porque nosotros ya compartimos agua, ya Esval saca agua de acá, ya saca agua desde Romeral hace muchos años desde un pozo que tiene para abastecer a consumo humano a muchos lugares, a Hijuelas, a La Calera y Valparaíso (...) Nosotros ya estamos en escasez hídrica, es ilógico que saquen de acá para abastecer otra zona con escasez hídrica", finaliza la mujer.

Esval

Consultado sobre el eventual impacto que tendría en la disposición de agua para los vecinos del sector, el subgerente zonal de Esval, Rodrigo Lastra, aseguró que "la conducción que la empresa está construyendo no tendrá ningún impacto entre los vecinos de Romeral". Esto, "pues es una tubería que transportará agua y no considera la extracción de esta: solo conducirá el recurso desde los pozos de Llayllay hasta el canal Waddington, para reforzar la recarga del embalse Los Aromos y no de forma continua. Es decir, no habrá ningún efecto en las fuentes del sector Romeral".

En esa línea, indicó que "hemos explicado a la comunidad en varias oportunidades, y cada vez que se nos ha sido requerido, todos los alcances de las obras que, además, cuenta con todos los permisos necesarios. Seguimos en contacto con la comunidad y autoridades, atentos a las dudas que puedan persistir, tal como lo hemos hecho desde el inicio del proyecto, el que ha sido coordinado con los canalistas, EFE, DGA y DOH". J