• U. La Calera sufrió fea derrota en una guerra de goles en el sur

    Dos calamidades debió sortear Unión La Calera en la primera parte del partido. Número uno: la lesión de uno que casi nunca padece estos inconvenientes, el capitán Christian Vilches. Lo reemplazó en los diez minutos Matías Navarrete, y en los 16' el defensor empujó el balón contra su propio arco y decretó el autogol con que Huachipato se puso tempranamente en ventaja.

    Por largo rato se descompuso en la cancha el conjunto de Juan Pablo Vojvoda y quedó a merced por momentos de los rápidos ataques del elenco acerero, que encontró en Walter Mazzanti a un agente peligroso por la banda derecha. Los demás jugadores de Huachipato exhibieron un trajín vertiginoso que complicó a Leiva, Castellani y compañía, a quienes les costaba progresar en la cancha. Dio la impresión que, liberados del desafectado técnico Gustavo Florentín (en la víspera del duelo), los jugadores del elenco sureño se soltaron y tuvieron un despliegue superior al que venían mostrando. Y con ese sencillo argumento coparon mejor la cancha los ahora dirigidos por el DT de inferiores Juan José Luvera.

    Le costó a Calera tener algunas aproximaciones a la portería de Gabriel Castellón, quien solo pasó susto con un disparo elevado de Leiva, quien finiquitó mal una maniobra que habían armado entre Rodríguez y Andrés Vilches.

    La ocasión del empate llegó gracias a una presencia del zaguero Santiago García en el área rival, que provocó una mano de Mazzanti. Penal y gol de Castellani en el filo del descanso. Pero en la jugada siguiente el propio Mazzanti estuvo a punto de definir entrando en solitario, aunque no pudo con el achique del portero Martín. Fue un aviso de lo que vendría en el segundo tiempo.

    GOLES IBAN y VENÍAN

    En un partido que nunca le quedó cómodo a Unión la Calera, y más todavía si Vilches en la primera jugada de peligro del complemento no pudo con el achique de Castellón. A la jugada siguiente el hábil Javier Altamirano se filtró en el área y, tras superar dos marcas, disparó bajo y ajustado para el 2-1.

    En los 24 del complemento parecía todo liquidado con el penal de Wiemberg a Juan Sánchez Sotelo, que el propio delantero argentino transformó en el 3-1. Pero tres minutos después, Stefanelli, quien ya estaba en la cancha, sorprendió con un remate de emboquillada para un segundo descuento. La ilusión se instaló en los rojos, pero el juego nunca acompañó a las intenciones del conjunto calerano, ya que cada vez que el cuadro local se aventuraba en campo rival encontraba grandes espacios ante una defensa roja que hacía agua.

    Así ocurrió en la media hora del segundo tiempo, cuando un balón recuperado en campo propio con un Calera medio regalado, le permitió a Walter Mazzanti coronar su buena jornada con un gol, en una jugada en que la defensa calerana y Martín Arias se hicieron un enredo para despejar, incluso con tarjeta amarilla para el golero por reclamar nadie sabe qué.

    Pero el partido fue extraño, y cuando daba toda la impresión que los rojos se venían con un 4-2 en contra desde Talcahuano, a menos que Huachipato les encajara otro gol, desde la banca también apareció Fernando Cordero para matricularse con un zapatazo desde más de 40 metros, aprovechando la inseguridad de Castellón que reaccionó cuando la pelota ya iba entrando en su arco.

    Al final derrota 3-4 para los caleranos, que en el marcador estuvieron cerca, pero lo preocupante fue que, en el juego, estuvieron lejos de demostrar que realmente pueden amagar a la Católica en la punta. J