Cerrada hasta la próxima semana se mantendrá la municipalidad de Olmué, luego de que se dispusiera la suspensión de toda actividad para este jueves y viernes debido al inicio de una cuarentena preventiva, luego de que el administrador municipal, Alejandro Basáez, diera positivo por COVID-19.

La información fue confirmada, en primera instancia, por la propia casa edilicia a través de sus redes sociales, donde además aclararon que "la trazabilidad del caso indica que el contagio se dio en su entorno directo familiar y no se debe a un brote al interior del municipio".

De acuerdo a información que pudo recopilar La Estrella, el contagio de Basáez tendría relación con el brote de COVID-19 que salió a la luz la semana pasada en el ELEAM (Establecimiento de Larga Estadía para Adultos Mayores) "Villa Linda", de Limache. El administrador tiene un familiar que se desempeña como cuidador en ese lugar.

alcalde en cuarentena

A raíz de este contagio, uno de los contactos estrechos que se desempeñan en el municipio olmueíno que debió someterse a un examen PCR y comenzar cuarentena preventiva fue el propio alcalde Jorge Jil.

"He decidido interrumpir la atención de público en las dependencias municipales de calle Prat 12 hasta que logremos obtener los resultados de los análisis de PCR del personal que estuvo en contacto estrecho con el señor Basáez y así disminuir el riesgo de transmisión entre los funcionarios", indicó el jefe comunal sobre esta situación. Asimismo, informó que "por mi parte y conforme a las normas sanitarias estaré en cuarentena preventiva por 14 días y sin perjuicio de ello y dado que no he presentado sintomatología, seguiré trabajando desde mi hogar".

El cierre de la casa edilicia debido a la cuarentena preventiva trajo un efecto secundario para los habitantes de la comuna. Esto porque desde el municipio se confirmó que hasta el lunes todas las funciones de los departamentos municipales se mantendrán suspendidas, incluyendo la entrega de las esperadas cajas de alimentos.J

Agredido resultó un funcionario municipal de Quillota, quien el miércoles a las 11:00 horas acudió a entregar cajas de mercaderías enviadas por el gobierno a la población Baquedano, al poniente de la ciudad.

El funcionario, que era acompañado por otras personas, fue increpado por un vecino, quien no conforme con agredirlo verbalmente, también lo golpeó, para luego darse a la fuga. El afectado realizó la denuncia telefónica de inmediato a Carabineros, que acudió hasta el lugar.

Los funcionarios al momento de la entrega no se encontraban acompañados ni de personal de Carabineros ni del Ejército. El afectado luego acudió hasta el hospital, donde se le constataron lesiones.

Reacción municipal

Una vez conocido el hecho, el municipio se contactó con el afectado para entregarle la contención por lo ocurrido. Hay que recordar que la entrega de las cajas de alimentos, ya sean municipales, del gobierno regional o del gobierno central, es realizada por un grupo de funcionarios municipales. Al respecto, Óscar Calderón, administrador municipal, recordó que el municipio es uno de los que más cajas ha entregado en la región y eso es gracias a los funcionarios municipales que durante varios días realizan esta labor.

Y a propósito de este hecho, agregó que "queda esa sensación ingrata de que un funcionario reciba golpes de un vecino que perdió la paciencia, que se desquitó con quien no tenía que desquitarse, que su frustración la canalizó con quien lo estaba ayudando".

Calderón puntualizó que es un hecho aislado y que en nada empaña la entrega de 30 mil cajas que han realizado y que se ha llevado a cabo de manera normal.

"Por supuesto que si esto se vuelve a repetir tenemos la obligación a tomar las medidas, estamos del mismo lado, estamos trabajando para la comunidad, estamos en la misma calle, absolutamente trabajando para llegar de la medida más rápida a quienes lo necesitan más que nunca", concluyó. J