• En la Villa Rapa Nui se duchan de madrugada por la sequía

    En la Villa Rapa Nui desde hace dos meses que comenzaron con problemas en la presión del agua, lo que genera inconvenientes tan cotidianos como tener que ducharse con agua fría o lavar la loza de madrugada.

    Lo que hasta hace poco era un problema latente en la parte norte de la región, como Petorca, ya arribó de forma preocupante a Quillota.

    El avance del fantasma de la escasez hídrica por el territorio ha sido implacable y de eso dan cuenta los constantes problemas de bajo flujo de agua potable en viviendas de la zona urbana y, con ello, los problemas de presión en las instalaciones.

    Para conocer de cerca la problemática, La Estrella hizo un recorrido por la Villa Rapa Nui de Quillota, en donde los vecinos deben convivir con "un hilo de agua". Muchos de ellos incluso han tenido que habituarse a madrugar para poder ducharse con agua caliente. Algo que debiese ser normal en un hogar.

    Lo mismo cada día

    Rafael Aguirre, uno de los afectados, calcula que al menos la mitad del día el escaso flujo de agua es persistente.

    "Tienes baja de presión en la mañana desde las 06.00 de la mañana hasta las 11.00 horas más menos, y después tienes problemas de presión desde las 19.00 horas hasta las 02.00 de la mañana", detalla.

    La situación es tal, que Aguirre dice que "no prende el calefont y si te vas a bañar, la cantidad de agua que sale es un chorrito, que es como si te estuvieras bañando con una manguera".

    Aunque claramente no es lo óptimo para enfrentar el complejo escenario, quizás alguien joven como él puede hacer el esfuerzo de levantarse antes de las 06.00 para ducharse o simplemente hacerlo con agua fría.

    Leyla Gallardo, otra de las afectadas, sostiene que en el sector viven "muchos niños y adultos mayores", lo que complica aún más el panorama.

    Sin embargo, ella como comerciante también está preocupada, porque en el minimarket donde trabaja ofrece productos envasados y carne.

    "Uno tiene que mantener siempre la higiene acá en el negocio, porque le está vendiendo a otras personas cosas que después van a consumir y uno necesita agua para todo. Acá lavo las bandejas, la máquina. Claro que preocupa eso", manifiesta.

    Otra vecina que también accedió a contar los inconvenientes que tiene en su hogar por el bajo flujo de agua es Denisse Molina. Ya algo resignada con lo que ocurre, revela cómo se las arregla con el resto de su familia a la hora de ducharse.

    "En la casa ayudamos con darle la presión. Por ejemplo, si no enciende la ducha, hay que dar el agua caliente de la cocina, por ejemplo, y ahí hay más fuerza para que encienda el calefont, sino, no enciende. Ahí uno le avisa a quien esté en la casa con uno", comenta.

    En redes sociales, otros vecinos alegaron que incluso tenían que lavar la loza y la ropa de madrugada para conseguir más presión de agua.

    Más conciencia

    Rafael Aguirre analizó el origen del problema de la escasa cantidad de agua disponible y para él, una solución real y efectiva, "es tener un control de los afluentes de agua, porque no es un secreto para nadie que la mayoría de los afluentes de agua se los llevan las mineras o las empresas privadas. Yo creo que subsanar eso es una de las soluciones más potentes que hay".

    Asimismo, el joven agrega que debería haber más conciencia en la población y evitar derrochar el agua. "Otro problema, por más que queramos pensar que no, es la cultura de la gente. Todavía se ve gente regando el cemento, lavando autos. Hay que erradicar ese pensamiento", afirma.J

  • "Hemos regulado las presiones"

    El subgerente zonal de Esval, Gastón Placencio, dijo que están desarrollando un proyecto de mejoramiento integral del sistema en Quillota y La Cruz, lo que beneficia a más de 35.000 hogares de ambas comunas. "Como parte de esta iniciativa, hemos regulado las presiones en algunos sectores puntuales (como el caso de Villa Rapa Nui), lo que nos ha permitido optimizar la distribución de agua potable a toda la zona", sostuvo. Placencio agregó que estas regulaciones pueden generar una percepción de baja relativa en la presión del suministro, sin embargo, "ésta cumple plenamente la norma establecida, lo que es monitoreado con autocontroles permanentes y fiscalizaciones de la autoridad sanitaria".