• Amarran a trabajadores y huyen con 2 camiones con mercadería

    Instantes de terror vivieron cinco trabajadores ( dos conductores y tres guardias) de la bodega central del supermercado Cencocal, que se encuentra en la Ruta 5 Norte en Nogales, quienes fueron amarrados y amenazados con presuntas armas de fuego por cinco desconocidos. Si bien las víctimas fueron liberadas cerca de las 04.00 de la madrugada, según información entregada por los mismos empleados, el ingreso de los sujetos habría ocurrido cerca de las 22.00 horas.

    Para acceder al recinto, los asaltantes a rostro cubierto y con armas de fuego corta en su poder, intimidaron a los tres guardias, para luego amarrarlos de manos y encerrarlos en la zona de carga del camión que se encontraba en el lugar. "Dos de ellos (los trabajadores) estaban en una caseta y el otro estaba en otra dependencia haciendo una ronda. Ahí los sujetos ingresan por la parte posterior, aparentemente, al recinto", indicó el capitán José Ramírez, de la Séptima Comisaría de La Calera.

    Más tarde, cerca de las 03.00 de la madrugada, indicó Ramírez, al llegar dos conductores de la empresa al recinto, hicieron lo mismo con ellos y fueron dejados junto a los tres guardias.

    Sin nadie más que pudiese oponer resistencia, los sujetos encapuchados procedieron a sacar una variedad de mercadería de camiones que estaban cargados para llenar otros dos. Para ejecutar el ilícito, detalló Ramírez, "rompieron los sellos de otros camiones que mantenían mercadería". Las maniobras de carga a pulso se habrían extendido por cerca de 5 horas.

    Tras el escape de los desconocidos en los dos camiones cargados con productos, uno de los guardias logró desatarse de sus amarras y llamó por celular a un supervisor, quien después dio aviso a Carabineros. Minutos más tarde, los funcionarios llegaron hasta la bodega y terminaron de liberar a los trabajadores.

    La Estrella se comunicó con la empresa, pero vía telefónica se negaron a entregar mayores detalles acerca del hecho. Sin embargo, según trascendidos, el monto de las especies sustraídas sería cercano a los 500 millones de pesos. Hasta el cierre de esta edición no se había logrado encontrar a los encapuchados a ni los vehículos sustraídos. J

  • En prisión preventiva hombre que golpeó y violó a su expareja

    Al menos noventa días tras las rejas deberá pasar un hombre de 37 años, identificado con las iniciales S.E.R.P., quien fue formalizado por violación y lesiones graves contra su expareja, de 29 años. La prisión preventiva fue decretada como consecuencia del ilícito, que se habría producido la noche del 25 de diciembre en una vivienda de calle Los Molles, en Villa Las Araucarias de Limache.

    De acuerdo a la información entregada por el capitán José Luis Navarro, de la Tercera Comisaría de Carabineros de la comuna, las agresiones habrían ocurrido mientras los exconvivientes se encontraban bebiendo alcohol. Ambos, detalla el uniformado, "supuestamente habrían estado juntos desde las 7 de la tarde (...) dentro de la ebriedad comenzaron los insultos y las agresiones por parte del agresor y que derivó posteriormente en una violación". Ambos compartían el domicilio mientras eran pareja, pero actualmente la casa era solo habitada por la mujer.

    Amarrada

    Cuando los funcionarios de Carabineros llegaron hasta el domicilio, tras recibir un llamado anónimo a la central de comunicaciones, lograron abrir la puerta y se encontraron con la mujer tendida en el suelo y con múltiples lesiones. A su lado, aún con los efectos de alcohol a cuestas, se encontraba el presunto agresor.

    Según detalló Navarro, la víctima estaba atada de pies y manos con cordones de zapatillas. "Mantenía bastantes contusiones en distintas partes de su cuerpo, siendo la más grave una en su nariz, ya que tenía fractura nasal por golpes de puño", indicó el uniformado. J

  • Gendarmería felicitó a funcionario que evitó una fuga desde penal

    Fue el 21 de noviembre pasado cuando tres internos de Centro de Detención Preventiva, CDP, de Quillota quisieron huir desde el penal a eso de las 3.30 de la madrugada, hecho que fue evitado por el gendarme Agustín Neira.

    "Estaba en el puesto número uno cuando escuché el candado de una puerta que da hacia el rancho (central de alimentación) antiguo. Me quedé escuchando porque me pareció raro, después escuché la malla y llamé al torre 8 (jefe de relevo), quien fue a ver y justo asomaron una mano desde el exterior, estaban cortando la malla y tiburones", relató el funcionario que recibió un reconocimiento por parte el director regional de la institución, Álvaro Rivera.