Como muchas cosas que se han generado en los últimos tres años, gracias a la presencia de la Oficina Local de la Niñez (OLN) de La Cruz, recientemente se pudo realizar el primer diagnóstico de niñez y adolescencia.

"Para nosotros es un hito muy importante porque sencillamente no existía nada y ahora contamos con una valiosa información de la que antes carecíamos y con eso vamos a poder construir la primera política para la niñez y adolescencia", comenta la directora de la oficina municipal, Patricia Menares.

Junto con agradecer el apoyo que se tuvo por parte de la alcaldesa Filomena Navia Hevia y de la seremi de Desarrollo Social y Familia de Valparaíso, Menares dijo que lo más meritorio de este diagnóstico fue que se hizo con la cocreación de niños, niñas y jóvenes, los que forman parte del Consejo Consultivo. "Ellos validaron los instrumentos de trabajo y realizaron los mapeos de los lugares seguros e inseguros para niños y niñas dentro de la comuna", prosigue la especialista, "es decir, no sólo están plasmadas sus opiniones, también fueron parte del proceso de recolección de esta información".

Menares dijo que en primer lugar se aplicó una encuesta que fue validada por el Consejo Consultivo, pero además hicieron las correcciones que encontraron más relevantes. "Después de eso recién la aplicamos a los niños y niñas de nuestra comuna, y nos da cuenta de lo fundamental que resulta que sus voces sean parte de las acciones que se realizan cuando se piensa en actividades que tienen que ver con ellos", apuntó Menares.

Pero la encargada de la OLN crucina fue más allá y aseguró que "otro de los hallazgos fundamentales con el conocimiento sobre sus derechos, porque si bien esto se viene hablando desde hace mucho tiempo, los niños y niños no los conocen en profundidad, ni logran integrarlos a la hora de llevarlos a la vida práctica para ponerlos en ejercicio".Por eso, todos los organismos que trabajan con niños y niñas van a tener que cambiar su forma de trabajar con ellos, porque "estos datos vienen a validar las voces de ellos, la de sus propias vidas, las de sus familias y las de su comunidad".

Menares dijo que ya es hora de terminar con las viejas estructuras e identificarlos como actores claves "en la identificación de necesidades y en la toma de decisiones socio-políticas, para que se pueda ir trabajando con ellos para romper las desigualdades que limitan la participación plena de los niños y niñas en cada una de las tomas de decisiones: esto está directamente relacionado la cultura local adultocéntrica, normativa, capitalista, patriarcal y capacitiva que minimiza las decisiones de los niños niñas y adolescentes en las etapas de su desarrollo evolutivo".

500 encuestas

Por último, Menares dijo que en los propios niños y niñas está la esperanza para avanzar, ya que "sus opiniones sobre el mundo deberían darnos una perspectiva diferente e innovadora, porque una de las cosas que tienen los niños es que siempre tienen respuestas sumamente innovadoras".Carla Guzmán, encargada de la OLN dijo que trabajaron con factores cualitativos y cuantitativos que en los que se trabajó con distintos grupos de jóvenes en donde, por ejemplo, dijeron que les importaba mucho la seguridad pública, la salud mental, el esparcimiento y la educación, incluso por sobre otros derechos relevantes como es el derecho a la vida. Con ayuda de todos al final completamos un total de 500 encuestas". J

La solidaridad, ha llegado desde todas partes hacia los sectores afectados por el megaincendio, de comienzos de mes. Con lamentables pérdidas, las comunas afectadas comienzan a levantarse.

En esa misma linea, la parroquia Santo Nombre de Jesús, ubicada en La Calera, comenzó una campaña de recolección de víveres, con el objetivo de colaborar con las instituciones religiosas afectadas por el fuego.

"Nosotros fundamentalmente, hemos estado ayudando con alimentos no perecibles, que hemos recibido mediante las misas y hemos ido acumulando y juntando, aunque todavía no las llevamos", comentó el párroco de la iglesia, Alejandro González.

Y es que fueron varias las parroquias afectadas por el siniestro, tanto en Quilpué, como en la ciudad jardín, donde sus feligreces fueron los que tuvieron mayores perdidas, tal como lo confirman desde el ente católico calerano.

"Como iglesia, ya sabemos a quien ayudar. Derivamos lo recolectado a alguna parroquia de Viña del Mar, donde sabemos que tienen dificultades, porque son sacerdotes de nuestra diocesis", detalló la autoridad eclesiástica, quien añadió que "lo entregamos a ellos, quienes se encargarán de destinarle a las mismas personas de sus comunidades". J