Como si ya no fuese suficiente con el impacto que ha recibido el río Aconcagua a causa de la escasez hídrica en la zona, por estos días el afluente vuelve a estar en la palestra noticiosa por una nueva, desagradable y alarmante razón: es uno de los ríos más contaminados de Chile.

Aquella decidora realidad se desprende de los resultados obtenidos en el Tercer Muestreo Nacional de Basura en los Ríos de Chile, desarrollado por el programa de ciencia ciudadana "Científicos de la Basura", dependiente de la Universidad Católica del Norte.

Para este trabajo se estudiaron 37 ríos con grandes volúmenes de desperdicios de distintas regiones del país y entre ellos estuvo el Aconcagua, que recorre desde cordillera a mar las provincias de Los Andes, San Felipe, Quillota y Valparaíso.

Específicamente, en este caso el estudio consideró un muestreo en Quillota, en el sector de Boco, apoyado por la labor voluntaria de la organización Mujeres y Ríos Libres.

ESTUDIO

Las jornadas de capacitación (vía telemática por la pandemia) y luego la del muestreo en sí, se realizaron mediante un trabajo coordinado entre la organización y el equipo de investigadores.

Durante aquella jornada en terreno, recuerda Ximena Figueroa, integrante de Mujeres y Ríos Libres, dentro de las labores que tuvieron que hacer junto a las demás voluntarias estuvo poner una malla en el río durante una hora. Pasado ese tiempo, "se sacaba y todo lo que se acumulaba en la malla se iba a este estudio. Ahí se encontró plástico y microplástico, pero también había camarones pequeños, que seguramente no se pueden desarrollar por la contaminación que hay", acota con preocupación.

Esta quillotana, que con la organización a la que pertenece lleva más de dos años organizando jornadas de limpieza en el río de forma autónoma y voluntaria, reconoce -con cierta impotencia en sus palabras- que no les sorprendió el nivel de contaminación que se detectó en el Aconcagua.

"Cuando vieron nuestro informe, ellos (los científicos) no lo podían creer, es demasiada la contaminación y nosotros lo sabemos. Nosotros hemos limpiando un lugar y después volvemos a limpiar el mismo lugar, porque no hay conciencia. Nosotros tenemos letreros de no botar basura, de llamados a reciclar, pero no hay ningún respeto", enfatiza Figueroa, quien añade que en el río es posible encontrar regularmente botellas plásticas (de un solo uso) y hasta muebles con cajones llenos de ropa, colchones y sillones, entre otros curiosos elementos.

Todo igual

A los resultados de este decidor muestreo nacional se refirió el director del programa "Científicos de la Basura", Martin Thiel, quien desde Estados Unidos accedió a hablar con La Estrella. El biólogo marino y doctorado en oceanografía alemán reconoce que tenía expectativas que la situación nacional en cuanto a la contaminación en los ríos nacionales mejorara en comparación al trabajo anterior en esta materia realizado el 2017, pero -lamentablemente- aquello no ocurrió.

"Lo hicimos en el 2013 y el 2017 y queríamos ver si la situación ha mejorado un poquito, porque en los últimos años ha habido un crecimiento de la conciencia ambiental de la gente y también hubo un aumento de la legislación, y por eso estuvimos especialmente interesados en los resultados (...) Pero los resultados no fueron tanto como lo hubiéramos deseado o esperado quizás, el diagnóstico es que la situación no ha mejorado, sigue igual. Vemos muchos problemas, mucha basura", lamenta el investigador.

De hecho, comenta que tanto en el río Aconcagua como en otros del país, encontraron -en promedio- 1,6 objetos de basura en un metro cuadrado y "esos son valores muy altos y, prácticamente, muy similar a lo encontrado en años anteriores", añade.

Grandes volúmenes

Además de la basura encontrada en el caudal del río, preocupa de sobremanera la impresionante cantidad de desperdicios hallados en sectores más apartados de la ribera, donde claramente alguien los depositó allí de forma deliberada.

"Por los volúmenes de basura, alguien llegó con una camioneta o con auto y botó ahí sacos de basura o montones de escombros. Lamentablemente es algo que vemos en todos los ríos de Chile, es algo muy frecuente estas acumulaciones que son una señal de que alguien de forma intencional bota ahí grandes volúmenes de basura en la ribera de los ríos y esto -desde nuestro punto de vista- es algo muy grave, porque los ríos son los que nos traen el recurso de nuestra vida, son los ríos los que traen el recurso más importante, el que más necesitamos, que es el agua", enfatiza Thiel.

Justamente el depósito y acumulación de residuos voluminosos es uno de los mayores dolores de cabeza para quienes voluntariamente limpian los ríos y, también, para las autoridades locales. Tema que en comunas que son atravesadas por el río Aconcagua, como Quillota y La Calera, están tratando de enfrentar.

Al respecto, el alcalde de Quillota, Óscar Calderón, destaca que es de suma relevancia la labor que se pueda desarrollar con organizaciones de la zona -como es el caso de Mujeres y Ríos Libres, por ejemplo- y , en ese sentido se está levantando una mesa de trabajo conjunta para desarrollar un plan de limpieza y descontaminación del río, acorde a las facultades que tiene los municipios para intervenir en la cuenca de los ríos.

Asimismo, señala Calderón, "uno de los avances ha sido formalizar a la gente que trabaja en el tema del retiro de escombros domiciliarios, con el objetivo de trabajar con ellos el tratamiento de los residuos y la recepción de los escombros, para que no lleguen al río (...) Estamos cursando infracciones a quienes siguen vertiendo escombro en este lugar, los que pueden ser con denuncias anónimas a través de una fotografía de la patente del auto y de la persona botando la basura". Junto con eso, indica, que se debe generar un cambio cultural en las personas, para que no sigan botando la basura en los afluentes.

En tanto, el alcalde de La Calera, Johnny Piraino, señala que como municipio están cerrando cada uno de los accesos que tenían las personas que llevaban camiones con material voluminoso al río. Además, informa que iniciaron una limpieza en cada uno de los puntos que estaban con una gran cantidad de basura.

"Lo que estamos haciendo es instalar una política de reciclaje que nos permita separar cada uno del material que era depositado en el río Aconcagua. Nosotros estamos separando el material, estamos motivando a los vecinos que pidan autorización, que paguen los derechos municipales para poder tener un control de todo el material que era depositado en el río Aconcagua, pero este es un tema que nos ha costado mucho como municipio. Ahí necesitamos también el apoyo del Estado a través de políticas efectivas", detalla. J

La situación no ha mejorado, sigue igual. Vemos muchos problemas, mucha basura".

El Tercer Muestreo Nacional de Basura en los Ríos de Chile se realizó entre noviembre y diciembre de 2021, con una participación de 39 equipos voluntarios en todo el país, en 37 ríos. En la coordinación del muestreo nacional estuvo el alumno de práctica de la Universidad Austral, Mauricio Ergas. Los resultados del muestreo confirmaron la presencia de desechos en todos los sitios. En estos ríos estudiados, los plásticos de un solo uso fueron la categoría de objetos más común, representando, en promedio nacional, el 32,2% de los objetos contabilizados y clasificados. En tanto, el 78% de los sitios registraron grandes acumulaciones de basura (compuestos por agregaciones de más de 25 objetos), las cuales fueron depositados allí con intención.