• La pandemia les cambió la vida, pero lograron reinventarse

    Al ritmo del pandero y la guitarra la señora Margarita nos recibió en su cálido hogar; tiene una personalidad muy llamativa y una sonrisa que conquista a todo Quillota. Con su dulce tono de voz nos hace pasar al patio de su casa, un lugar lleno de flores de todos los colores y formas posibles. Antes de tomar asiento busca una carpeta llena de fotos y recortes de diarios para mostrar su trayectoria en los talleres de folclor y otras actividades en las que ha participado.

    "Después de criar a mis cuatro hijos comencé a participar en talleres, pero siempre me gusto lo artístico, cantar, bailar y actuar, eran mi gran pasión", comentó. Sin embargo, con la llegada de la pandemia a la zona, Margarita explicó que todo en su vida cambió: "Antes me faltaba el tiempo para hacer cosas, salía todo el día y de un momento a otro ya no pude salir más, no podía bailar y visitar a mis amigas porque debía cuidarme".

    Entre sus memorias y recuerdos, la oriunda de Viña del Mar, pero amante de Quillota, mencionó que participó en diferentes concursos donde pudo dar a conocer su talento. Margarita se emociona y mueve sus manos muy rápido para relatar lo feliz que era al presentarse en los escenarios de las diferentes comunas de la región. "Junto a nuestro grupo de coro de Quillota cantamos tres veces en la competencia que organizaba el Teatro Municipal de Viña, también fuimos a San Felipe, La Calera y La Cruz", detalló.

    Con mirada triste, la voluntaria de la casa del adulto mayor reconoció que "extraño mucho bailar, extraño mandar a hacer nuestros trajes y pasar tiempo con el grupo del taller municipal". Ahora Margarita baila y canta desde su casa junto a su amado Polito, quien la ha acompañado por más de cincuenta años. Ellos disfrutan acompañándose en esta nueva cuarentena que enfrenta la comuna.

    Ahora espera que pronto la comuna pueda volver a fase dos para regresar a sus talleres que fueron suspendidos desde marzo del año pasado, espacio donde compartía con más adultos mayores y juntos se entregaban más vitalidad de la que ya tienen.

    Hoy Margarita continúa difundiendo el trabajo que realizó junto a su profesora en el taller municipal; va a las radios de la zona para visibilizar su arte y también la labor de las voluntarias de la casa del adulto mayor, recinto donde ella sirvió por muchos años y que actualmente sigue entregando mientras se pueda, amor, alimentos y alegría.

    Galerista y más

    Seguimos nuestro recorrido y una cuadra más allá de la casa calipso con amarillo de la viñamarina, pero quillotana de corazón, nos encontramos con el hogar de Paola Figueroa, una reconocida galerista y escultora de la comuna.

    Como buena artista, la casa de Paola parece un museo que cautiva con los cuadros en las paredes, obras textiles que representan la zona del norte, centro y sur, esculturas y más pinturas. En compañía de un té y también en el patio de su hogar, la galerista relató cómo ha sido su trabajo desde el inicio de la pandemia. "Ha sido difícil estar desde mi casa porque todo converge en un mismo espacio, pero sin duda con la pandemia me inundan más las ganas de crear y transmitir mi arte".

    La escultora y graduada de la Escuela de Bellas Artes de Quillota detalló que tuvo que convertir un espacio de su casa para poder trabajar sus obras y montar su galería. "Habilité un lugar en mi hogar, añadí una puerta y bueno ahora estoy ordenando y montando todo para que próximamente mi galería pueda abrir aquí y la gente pueda venir con reserva de hora". Paola recordó que la motivación principal para inaugurar su propio espacio surge porque no había otra forma de mostrar su arte, "a nivel país faltan oportunidades, pero acá en las comunas del interior cuesta aún más", expresó.

    Debido a la pandemia la galerista también comenzó a trabajar en conjunto con el museo Histórico Arqueológico de la zona y la directora del espacio cultural, Pamela Maturana. Juntas comenzaron a visibilizar el trabajo del museo, además de las obras de otros artistas. Ante este último punto Paola señaló "me tenían preocupada mis colegas, debíamos realizar un trabajo colaborativo para ganarle a esta situación".

    Con mucha pasión Paola nos invitó a conocer el espacio que pronto habilitará como su galería; es un lugar de creación e íntimo que refleja todo el trabajo y trayectoria de la artista, en un momento comenzó a buscar una obra que visibilizará en su próximo proyecto, obra que se enfocará en los tocados de pelo del norte y zona central. "Esto lo he creado hace poco, la cuarentena me ha ayudado a finalizar ya esta idea que tenía hace algún tiempo", indicó.

    Para concluir una escultura, esta artista comentó que suele tardar entre cuatro a cinco meses. "Es mucho, pero me gusta que sea así porque cada color, cada forma debe ser pensada, no es algo al lote", a esto agregó que "hoy con el coronavirus me he demorado en encontrar la inspiración para mis obras, sin embargo, siempre estoy buscando qué hacer, creo que esta situación también nos hace pensar y buscar que cosas nuevas podemos crear". J