• Adultos mayores y niños: cuidados y autocuidados para grupos de riesgo ante el covid-19

    Las estadísticas de covid-19 han demostrado que los adultos mayores han sido los más perjudicados con ese virus y, por ende, son los que están en mayor riesgo a la hora de un contagio positivo. Es fundamental cuidarlos y protegerlos en casa.

    El autocuidado en este grupo debe partir inicialmente por la mantención de sus tratamientos médicos, porque tengan una alimentación saludable, realicen actividad física en el hogar e incentiven la rutina y las emociones positivas.

    Es importante que mantengan sus recetas y diagnósticos a mano y que le cuenten a algún familiar o vecino (por teléfono) si tienen requerimientos de salud. Hay que tomar los medicamentos en los horarios establecidos y nunca automedicarse.

    Con el fin de que el cerebro procese lo que está ocurriendo, en el contexto e incertidumbre por la duración del aislamiento, se hace necesaria mantener una rutina:

    • Intentar despertarse y dormirse todos los días a la misma hora

    • Exponerse a luz solar (cerca de una ventana o si tiene jardín).

    • Todos los días levantarse y vestirse (evitar estar en pijama) para sentir que el día tiene inicio y término.

    • Incluir actividad física. Por ejemplo en la mañana pararse y levantarse de una silla 20 veces, luego caminar por la casa a paso rápido y hacer ejercicios de estiramiento. También puede utilizar para ejercicios de brazos paquetes de arroz o legumbres.

    • Incluir desafíos mentales: puzzles, crucigramas, sudokus, etc.

    • Respetar los horarios de alimentación. Mantener la hidratación, evitar consumo excesivo de sal, privilegiar consumo de frutas y verduras. Es ideal tener una red de apoyo que pueda entregar alimentos en su puerta.

    • Tener números de emergencias a mano y mantener la comunicación con personas cercanas, mediante teléfono o mensajes.

    • Antes de dormir realizar ejercicios de respiración profunda.

    Es importante enseñar conductas preventivas en los más pequeños y para ello sirve que los adultos las realicen de forma constante.

    • Comentar las conductas preventivas al momento de hacerlas (ejemplo: me voy a poner mascarilla para protegerme del coronavirus).

    • Reforzar positivamente a sus hijos cuando realicen medidas de autocuidado. Y hablarle de los riesgos que se enfrentan cuando no las hagan.

    • Entregar información clara y precisa, dando respuesta a sus preguntas, para así disminuir la incertidumbre y ansiedad que les puede generar la pandemia.

    • Practicar en conjunto las medidas preventivas básicas (uso de mascarilla, lavado de manos y distanciamiento social, entre otras). En el caso del lavado de manos, es importante que ellos aprendan cuándo y cómo hacerlo. Enséñeles que todos sus dedos, uñas y palma de manos deben llenarse con mucha espuma y frotarlas por más de 30 segundos.

    • Si va a salir a la calle con ellos, hay que familiarizarlos con las mascarillas o escudos faciales. Se deben sentir cómodos (ajústelos a su talla). Revisar que puedan moverse y jugar sin que se le caiga. La mascarilla siempre debe cubrir boca, nariz y mentón (que no quede suelta por los lados). Antes de ponerse la mascarilla se deben lavar las manos con agua y jabón o alcohol gel. Hay que enseñarles, además, que no deben jugar con su mascarilla o escudo facial, ni menos intercambiarlo. Se recomienda decorarla o pegarle adhesivos para hacerla más personal.

    • Converse con los niños sobre qué actividad pueden y no pueden hacer cuando ya estén en la calle. Planifiquen el paseo, idealmente que sea a una distancia caminable para evitar el transporte público. Pídales antes de salir que vayan al baño para evitar los baños públicos y realizar lavado de manos antes de la salida.

    • Enseñarles el saludo: que en vez de abrazos o darse un beso, pueden hacer un gesto con la mano o inventar un gesto propio.

    • Deben mantener distancia física con otros niños y evitar tocar superficies. Recuérdeles que ya no pueden jugar con juguetes de otros, pero sí pueden llevar uno suyo. Enseñarles a respetar los espacios demarcados y a que no traspasen los límites puestos por la autoridad.