• Cuarentena golpeó fuerte a feriantes minoristas

    Así como las calles caleranas se han visto prácticamente vacías en los primeros días de la cuarentena decretada para la comuna, el tramo de Alonso Zumaeta, entre Maratón y Pedro de Valdivia, que es donde funciona la feria minorista, también luce casi desprovisto de gente, y eso lo resienten los locatarios, que el martes pasado, por ejemplo, igual llegaron a instalarse con sus productos, varios inquietos por no saber si podían trabajar o no, pero todos complicados porque prácticamente no andaba nadie comprando.

    Juan Arancibia y la señora Sonia estaban en el primer puesto, como es habitual, con sus lechugas y acelgas, y según dijeron, "los días de semana al menos daba para sacar los costos, pero ahora no anda nadie. Además, no sabemos si podremos seguir viniendo porque no nos manejamos con la computación para sacar permisos. Nosotros venimos desde Quillota y traemos nuestros verduras desde San Pedro".

    Ellos y otros comerciantes indicaron que el sábado anterior la feria estuvo abarrotada de gente, "que se llevaron todo, compraron a montones como para abastecerse para la primera semana de cuarentena, así que no esperamos que vengan en un buen rato más".

    Particularmente molesto estaba Mauricio Rojo, quien en su puesto de frutas daba vueltas para ver si de casualidad llegaba algún comprador. "Es increíble cómo las autoridades toman estas medidas echaditas para atrás en sus casas y nos perjudican a quienes trabajamos vendiendo en el día a día, ¿qué sentido tiene haber decretado la cuarentena ahora? Yo traigo pepinos de Ovalle, naranjas de Pucalán, ¿que voy a hacer ahora? Tal vez tenga que salir a repartir por las calles en el vehículo para no perder todo", se lamentaba el feriante.

    Otros productos

    En otro sector de la feria, un par de comerciantes que ofrecen productos de higiene eran conminados a retirarse por los inspectores municipales. Una mujer que se identificó como Angélica subía rápidamente varios bidones de detergente líquido a un camión.

    "Me dijeron que esta mercadería no entra en los productos esenciales, así que me que tengo que ir no más. En el rato que estuve en la mañana alcancé a vender harto porque la gente igual necesita estos artículos", dijo la mujer, mientras en el puesto de al lado la encargada había ido a buscar un vehículo para cargar y llevarse lavalozas y rollos e papel higiénico.

    Especialmente afectados se encontraban en un puesto especializado en frutos como maracuyás, lúcumas, barraganetes (plátanos verdes) y yucas, que son una especie de papas. "Son productos para extranjeros, haitianos y colombianos son nuestros principales clientes. Es que ya nos habíamos ido a pique con la fruta tradicional, ahora nos iremos a pique con esto", alega Noel Paz, quien lleva doce años vendiendo en la feria minorista.

    "Con la cuarentena en Quillota, la gente se había venido a Calera a comprar y por eso colapsó todo acá. Y ahora que en otros lados están saliendo, decretan cuarentena acá. Se nos echará a perder todo lo que habíamos comprado en Santiago, de allá traemos estos frutos. No sé qué vamos a hacer sin clientes. Echaré mano al diez por ciento de la AFP, pero eso es solo un parche", cerró el feriante. J

  • sí pueden

    Ernesto Ossandón es inspector municipal y junto a una colega concurrió a supervisar los puestos de la feria. Según el funcionario, "están autorizados para funcionar los puestos de frutas y verduras, además de abarrotes. Ellos pueden seguir funcionando en los días y horarios normales, pero todo de acuerdo a las directrices que dio el Minsal".