• Con internet, teléfono y el whatsapp sobreviven locatarios

    Ante un aumento explosivo en los contagios por COVID-19 en Quillota, las autoridades sanitarias decretaron cuarentena total a partir del viernes pasado. La medida sanitaria ha obligado a los comercios locales a cerrar sus puertas, o bien, a reinventarse, ofreciendo distintas alternativas para seguir abasteciendo a la ciudadanía.

    El presidente de la Cámara de Comercio de Quillota, Ricardo Ortiz, se refirió a la situación como algo complejo, pues "hay pequeños comercios en que las pérdidas parten en el 50%. Hay que exceptuar a los que trabajan en el rubro de alimentación -no gastronómico-, ya que son los únicos que de alguna manera se han librado de esta problemática", comentó.

    Además, Ortiz explicó que las transformaciones de atención al público en medio de la crisis sanitaria no son de la noche a la mañana: "El tema del delivery considera una logística que no es inmediata, hay que tener permisos, preparación, personas que harán las entregas, adecuar el costo del transporte asociado a una merma en que los ingresos no son los que tenían hasta un tiempo atrás".

    "La ciudadanía, nuestros clientes de siempre, han vuelto a mirar al comercio minorista como una alternativa", aseguró el presidente gremial. En este sentido, hizo un llamado a seguir prefiriendo este tipo de productos y servicios para mantener un equilibrio.

    Para enfrentar los efectos de la crisis económica que se arrastra desde el año pasado, Ortiz especificó que, además de un trabajo inmediato enfocado en el cuidado de las personas, es necesario que las autoridades "vayan pensando qué hacer con las patentes comerciales o los permisos, considerando un apoyo directo y ver qué ofrecer a los empresarios para que no tengan que cerrar sus locales".

    Carnes Magnere

    La empresa familiar de cecinas, congelados y carnes, ubicada en O'Higgins 129, está atendiendo de lunes a domingo entre 9:00 y 14:00. Debido a la pandemia, el local ofrece servicio de reparto a domicilio con un costo de $2.000, tras previa coordinación al número de contacto +56998724437.

    "Esto lo veníamos viendo hace un tiempo, se dio la oportunidad ahora de echarlo andar. Ha tenido respuesta, es lento, porque lógicamente es algo nuevo, la gente no se ha adaptado, diferente a lo que pasa en otras ciudades", explicó el dueño del negocio, Jorge Magnere.

    Relojería Soto

    "Nació por el reinvento que nos obligó a hacer el estallido social y ahora la pandemia", aseguró Patricio Soto, uno de los representantes del local que ofrece insumos que no son considerados de primera necesidad, pero que se transforman en bienes esenciales para locales de comida que funcionan con delivery.

    Relojería Soto vende artículos de menaje, como productos de aluminio o de línea industrial, los cuales no son comercializados en supermercados. Además, ofrecen pilas audiológicas, las cuales son un elemento fundamental para quienes poseen algún grado de sordera y utilizan audífonos.

    Las entregas son realizadas con previo acuerdo en el local ubicado el Prat 210 y no tiene ningún costo extra. Para coordinar compras y entregas se debe realizar al +569 42584637.

    Lonkonao Boliche

    La cocina de Lonkonao Boliche, ubicada en Pudeto 726, se enfoca en preparaciones chilenas con recetas caseras. Este local ofrece almuerzos que van desde los $2.800 y los $3.200, valores que incluyen los repartos entre las 13:00 y las 18:00.

    "Los días de lluvia y los sábados hay sopaipillas, picarones y empanadas (…) todo basado en nuestra tradición culinaria", comentó Brenda Castillo, parte del equipo Lonkonao. Los pedidos pueden ser realizados al número +569 62914301 o al fanpage de Facebook "Lonkonao Boliche".

    Hods Quillota

    Priscila Herrera y su esposo Benjamín cuentan con dos locales Hod's de comida rápida en av. Valparaíso 277 y Prat 142, pero este último se encuentra cerrado mientras dure la cuarentena. Desde antes de la pandemia contaban con servicios de delivery, mas ante la crisis sanitaria y el confinamiento obligatorio, este se ha transformado en su principal forma de vender teniendo un solo local en funcionamiento.

    Completos, churrascos, papas fritas, pollo frito, hand rolls, chorrillanas, entre otros, son los platos que ofrecen los locatarios para degustar a sus clientes. Todos los productos pueden ser solicitados en formato de combo -con papas y bebida- con despacho a domicilio.

    El delivery abarca a Quillota Urbano, el cual gratis por compras superiores a $7.990 o de $1.500 por pedidos debajo de ese valor. Asimismo, los repartos también se realizan a La Cruz, San Isidro, La Palma, San Pedro y Pocochay. Los pedidos pueden realizarse de lunes a sábado entre las 12:00 y las 21:00 a través del whatsApp +56940660800.

    Panadería Central

    Hace dos meses que la Panadería Central en Chacabuco 285 ofrece servicios de delivery de sus productos, entre los cuales destacan el pan, las roscas y los pasteles. El costo de envío es de $500 debido a que trabajan en alianza con Moto Quillota, quienes ofrecen servicios de reparto a domicilio.

    Los pedidos pueden realizarse al +569 95318031 de lunes a sábado entre las 8:00 y las 14:00, mientras que los despachos comienzan a realizarse a partir de las 15:00 horas.

    La dueña y administradora del local, Catalina Bugedo, explicó que hoy el 90% de las ventas se realizan directo en las casas, pues en medio de la cuarentena total la asistencia física al local se ha visto fuertemente reducida. J