• "Amebas asesinas" acechan a los vecinos de la planta de tratamiento de Olmué

    Cuando a la familia Silva Ruiz le presentaron el proyecto de Planta de Tratamiento de Aguas Servidas para comuna de Olmué se hicieron asesorar. Acudieron a expertos y la respuesta fue siempre la misma, era lo mejor que la comuna podía tener así es que, antes de ser expropiados, vendieron parte de su predio para la instalación de la planta.

    Era la primera parte de la década de los 90' y la construcción sería subterránea. No habrían ruidos ni olores, el agua saldría tratada, incluso apta para el consumo, pero nada de eso ocurrió y hoy ellos y sus vecinos viven en lo que han denominado "zona de sacrificio".

    Esto motivó a que, tras una serie de intentos estériles por arreglar la situación, en diciembre pasado la familia interpusiera un recurso de protección en la Corte de Apelaciones de Valparaíso, que, si bien fue acogido, aún no se pronuncia a favor o en contra.

    Enfermos

    El argumento de la presentación se basa en la Constitución Política de la República de Chile, específicamente en los artículos referidos al derecho de vivir en un medio ambiente libre de contaminación y el derecho a la protección de la salud.

    Y aunque el olor y la contaminación siempre estuvieron presentes, no sabían que su salud se vería afectada hasta ahora.

    Cuando se gestó en ellos la idea de presentar un recurso de protección se hicieron asesorar por un ingeniero experto en temas ambientales, con vasta trayectoria en el desarrollo de energías quien accedió a vivir en el lugar para estudiar el comportamiento de la planta.

    A poco andar comenzó a sentir una serie de molestias físicas que eran compartidas por la familia Silva. Tos, lentitud en sus movimientos y desconcentración los llevaron a realizar una serie de consultas médicas, llevándose dramáticas sorpresas.

    Ello porque tanto la dueña de casa, Patricia Ruiz, como su esposo, sus hijos y el asesor salieron positivos al examen de "Naegleria Fowleri", más conocida como "ameba come cerebros", por lo que la discusión ya no se trata de ruidos y olores, sino que pasó a otro plano aún más peligroso.

    En medio de este proceso, Hipólito Silva acudió al Hospital Naval donde además le realizaron una radiografía de tórax que generó una serie de alarmas en el nosocomio.

    "Están todos los exámenes pésimos, todos nos sentimos mal, no podemos dormir. Me fui a hacer una radiografía de tórax y me preguntaron porqué me hacía el examen, yo les comenté lo que pasaba acá en Olmué y cuando el tecnólogo vio la radiografía llamó de inmediato al doctor y me preguntaban cómo era posible que aún estuviera vivo", relató Silva.

    Un certificado médico emitido por el doctor Werner Jensen Reyes, infectólogo del Centro Médico Clínica Ciudad del Mar, señala que "certifico que he tenido a la vista exámenes de laboratorio de los pacientes Patricia Ruiz y Andrés Silva, en un grupo de personas (fecha 21/02) patógeno que pone el riesgo vital a estas personas si desarrollan cuadro de meningoencefalitis aguda".

    En el resultado del examen realizado por los pacientes en el laboratorio clínico Diagnostika Alemana señala que a la secreción nasofaringea "se observa abundante cantidad de Protozoo compatible con Naegleria Fowleri" (ameba come cerebro), a eso se suma una infección por Estafilococo Aereus.

    Al ISP

    Por estos días, la familia está en proceso de repetición de los exámenes que serán derivados al Instituto de Salud Pública.

    Temen que así como ellos muchos otros vecinos estén enfermos y por temor o desconocimiento no acudan a los servicios de urgencias para realizarse los exámenes correspondientes.

    Consultado el doctor Rodrigo Cruz, infectólogo de la Universidad de Valparaíso, éste sostuvo que lo mejor en este caso es que sea el Instituto de Salud Pública quien entregue un informe, proceso en el que está la familia.

    "Hay que certificar bien que efectivamente estas personas sean portadoras de estos parásitos que son protozoos que se encuentran principalmente en lagos, en piscinas mal aseadas, en aguas detenidas y pueden provocar principalmente meningoencefalitis", señaló.

    El próximo paso que debieran realizar los afectados es repetirse los exámenes en laboratorios con referencia y recurrir a biología molecular en el ISP en Santiago.

    "Ellos efectivamente pueden haber adquirido estos protozoos por la vía nasal al estar en contacto permanente con el agua estancada y de la vía nasal puede traspasar la barrera al cerebro y de ahí a las meninges, que son infecciones graves y muy sintomáticas. Ellos deben esperar la confirmación del ISP, pero podría ser posible que presenten este protozoo porque son aguas estancadas y bastante sucias", aseguró el médico.

    Municipio

    La planta de Tratamiento de Aguas Servidas es de responsabilidad municipal y actualmente se encuentra en un proceso de mejoramiento, obras de debieran haber concluido en diciembre pasado, pero que aún no son inauguradas.

    El abogado del municipio Jorge Torres señaló que una vez que fueron notificados del Recurso de Protección de inmediato entregaron todos los antecedentes que se solicitaron por parte de la Corte de Apelaciones.

    "La vecina se siente afectada por la planta por una serie de consideraciones que materializa en su recurso y la municipalidad en el informe que le contestó a la Corte indica que en más de 20 años de funcionamiento de la planta nunca hubo un reclamo ni un recurso de protección de la naturaleza que ella lo plantea ahora. Además hace referencia a algunos procesos que habrían sido erróneos y algunos procesos constructivos que no se habrían cumplido, no obstante, toda esa fiscalización la ha hecho constantemente tanto el Gobierno Regional porque es el que ha hecho los aportes para el proyecto de modificación de la planta y la autoridad sanitaria, por lo tanto nosotros creemos que no existe mérito alguno para acoger el recurso", indicó el abogado.

    Torres no niega que puede haber alguna molestia por vivir al lado de una planta de tratamiento, pero no al nivel que reclama la familia. Argumentó además que no pesan órdenes de suspensión ni de clausura de la planta lo que a su juicio demuestra que no hay peligro sanitario.

    Respecto de los exámenes que se ha realizado la familia, el abogado señaló que "cualquier persona puede presentar exámenes médicos de cualquier naturaleza y no se puede determinar a priori si es que ese examen médico tiene una causa inmediata por la planta".

    Pese a que las obras aún no concluyen, el municipio puso término al contrato de trabajo con la empresa que se adjudicó los trabajos por algunos incumplimientos del contratista. "Las obras que se contrataron están más del 90% ejecutadas", aseguró el jurista. J

  • Superintendencia

    La familia mandante del recurso solicitó que se hicieran diversos informes de organismos públicos para determinar si el funcionamiento de la planta es adecuado. Uno de ellos fue a la Superintendencia de Servicios Sanitarios quien en su informe señala que "las atribuciones de la Superintendencia de Servicios Sanitarios son la fiscalización de los servicios sanitarios concesionados (...) los sistemas de agua potable y alcantarillado de la localidad de Olmué, incluyendo la PTAS, son operados actualmente por la I. Municipalidad de Olmué fuera del régimen de concesiones sanitarias y por lo tanto fuera de las atribuciones de fiscalización del esta Superintendencia", lo que a juicio de los vecinos, deja a esta planta en tierra de nadie.