• A Quillota llega obra inspirada en incendio de la discoteque Divine

    La madrugada del 4 de septiembre de 1993, el terror y la desesperación se apoderó de la discoteque Divine de Valparaíso, en calle Chacabuco 2683.

    Hasta cerca de las 03.30 horas, que fue el momento en que sonó la alarma de incendio en el recinto, todo marchaba como cualquier sábado: risas, baile y una que otra muestra de amor entre el público homosexual que asistía frecuentemente a pasar un buen rato en el lugar.

    Los eventos de la vida son impredecibles y, claro, esa jornada no fue la excepción, ya que lo que debía ser una noche de fiesta terminó con llamas consumiendo toda la discoteque y matando a 16 personas.

    Aunque en septiembre se van a cumplir 25 años, la tragedia sigue siendo recordada como una de las más catastróficas de la historia policial chilena. La última información oficial que se posee es del año 2010, cuando el Movimiento de Liberación Homosexual (MOVILH) instó a la justicia a aclarar lo ocurrido.

    Entonces, según un informe detallado por la abogada María Angélica Castro, el incendio fue causado por una falla eléctrica. Finalmente, porque el caso prescribió, no hubo culpables.

    Sin embargo, aunque en las familias, amigos o en quienes sólo se conmovieron con el destino de quienes perdieron la vida se mantiene el triste recuerdo de esa jornada, con el paso del tiempo lo ocurrido ha dado espacio para rememorarlo de una manera esperanzadora.

    "Agorafobia"

    La obra "Agorafobia", de la compañía "Teatro La Deriva" y dirigida por el actor porteño Sebastián Ayala, precisamente busca eso y, también, establecer que la intolerancia no debe tener cabida en ningún espacio de la vida.

    La propuesta, que debutó sobre los escenarios el 2015 en Valparaíso, llegará este domingo 10 de junio al Centro Cultural Leopoldo Silva Reynoard, en el marco de una circulación regional financiada por el Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, que tuvo además fechas en San Joaquín, Casablanca y Quilpué y, finalmente, Quillota. La entrada será liberada y el montaje comenzará a las 19.00 horas.

    La obra

    De acuerdo a Ayala, la obra tiene el valor de poder acceder a fuentes de información poco escuchadas. "Dar voz y espacio a aquellos relatos que comúnmente la historia oficial silencia, es un ejercicio de resemantización de la historia que nos permite volver a comprendernos simbólicamente desde otro ángulo".

    Si bien la propuesta está basada en lo ocurrido aquella madrugada de septiembre, sobre el escenario se desarrolla una ficción con cuatro personajes.

    Estos, detalla el director, "representan, de algún modo, diversas posturas y modos de pensar de la transición a la democracia". El montaje tiene un relato onírico no lineal y fragmentado, donde "El Amo", ex propietario de la discoteque, recuerda los últimos días que vivió junto a Sasha, su pareja travesti, y Connie su amante, una transformista nueva del local nocturno, quienes son víctimas del incendio.

    "El Amo" , al sentirse culpable por la muerte de ambas, intenta distanciarse de la gente. Sin embargo, las noches de insomnio y de parálisis del sueño no le permiten olvidar aquellos momentos.

    La puesta en escena, en tanto, presenta una atmósfera épica que se nutre de las estéticas de los años ochenta y noventa. En ella, los personajes deambulan entre distintos tiempos y realidades buscando la justicia que dignificara las muertes.J